Siempre has pensado en ser socorrista
Las personas acreditadas para vigilar, prevenir y garantizar la seguridad son responsables del buen comportamiento de los bañistas en playas y piscinas por todo el mundo.
Unos son socorristas mientras estudian o mientras se replantean su futuro profesional en otro ámbito y otros, con gran vocación, dirigen su carrera profesional al salvamento y socorrismo sin dudar ni un segundo. Tanto si eres de los primeros o de los que tienen vocación, necesitas conocer cuál será tu camino para llegar a cumplir el objetivo de convertirte en un buen socorrista.
¿A quién no le gustaría poder salvar vidas?
Resolvemos tus dudas con unos consejos de cómo afrontar tu reto.
1. Prepárate físicamente
Tú forma física debe estar a la altura. Piensa que una persona necesita de tu ayuda y tienes que responder en cuestión de segundos.
2. Nadar es importante y nadar bien es fundamental
Entrena como si fueses un gran nadador para poder llegar a tiempo. Practica todos los estilos de nado y utiliza la tabla para fortalecer las piernas y realizar una buena patada. Busca un entrenador certificado para que te ayude a mejorar la técnica y poder nadar más rápido durante mayor tiempo.
3. Corre, no pierdas tiempo en la arena, cada segundo cuenta
Necesitas ser rápido y tener lo que llamamos “fondo”, que es ni más ni menos, la resistencia ante un ejercicio físico. Corre por la arena y comprobarás que requiere más esfuerzo que correr por asfalto. Además, es bueno para fortalecer tus ligamentos. Quizás también puedas utilizar las escaleras para fortalecer las piernas, recuerda que con unas piernas fuertes llegarás más rápido y llegarás más lejos.
4. Que la fuerza te acompañe para salvar una vida
Trabaja tus músculos para tener fuerza. A veces, un par de segundos marcan la diferencia entre la vida o la muerte. Por ello, tener una planificación de entrenamiento de la fuerza te ayudará a mejorar este aspecto, siendo uno de los puntos más importantes a la hora de remolcar al bañista hasta un lugar seguro.
5. Nadie ha desarrollado la respiración bajo del agua aún
Si debes sumergirte, ponte a practicar tu apnea para construir una buena capacidad pulmonar, ya que habrá situaciones en las que la persona en apuros no pueda liberarse de aquello que lo atrapa, en este caso, tendrás que ser capaz de aguantar el aire mientras buceas durante largos periodos de tiempo.
6. Necesitarás energía
En momentos críticos deberás tener la batería cargada, así que aliméntate bien, una dieta saludable y equilibrada es clave. El gasto energético será elevado, asimismo la energía de los alimentos que consumas debe ser lo más natural y saludable posible.
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7. Fórmate
Busca tu centro profesional en salvamento y socorrismo. El saber no ocupa lugar y en este caso, es vital el conocimiento. Puedes encontrar cursos para obtener tu certificado en sedes como la de la Federación Española de Salvamento y Socorrismo.
8. Estudia e interioriza las maniobras esenciales
Estas serán imprescindibles para la persona en apuros: RCP y Primeros Auxilios. Te aconsejamos adelantarte, como ya lo estás haciendo, para conocer y actualizarte sobre las diferentes técnicas de RCP según la persona y los procedimientos de Primeros Auxilios.
9. La prevención es fundamental
Aprende a identifica las señales de peligro. En ocasiones, serán imperceptibles, pero decidir si existe o no depende de ti. La prevención es determinante, y a veces ocurre que no somos capaces de ir un paso por delante, lo que se traduce en que el peligro es ya real.
Los socorristas con una buena preparación son capaces de permanecer en vigilancia o tomar precauciones antes de que la persona esté en peor situación.
Algunos de los signos más comunes son:
- Nadadores de bajo nivel, sumergen la cabeza de forma constante e incontrolada. Siempre están cerca de objetos flotantes por el miedo de ahogamiento.
- Una de las señales más obvias por los bañistas es el grito de ayuda y el movimiento de brazos haciendo aspavientos. Claros signos de pánico.
- Mucha atención a aquellas personas que se sumergen y tardan tiempo en salir a la superficie. Podrían estar teniendo un contratiempo.
10. Memorizar los diferentes protocolos de actuación
Cada entorno de trabajo tiene sus propios protocolos de actuación y seguridad. Sin embargo, están los protocolos básicos que de aplicación general. Todos deben ser estudiados, comprendidos y memorizados.
Es por ello que General Drones pone a tu disposición un Protocolo de Actuación en el apartado Auxdron, para que puedas descargarlo y te sirva de ayuda ante situaciones de emergencia.
11. Practicar con los diferentes materiales de salvamento
Debes hacer uso de estos elementos en momentos críticos, no dudes de su utilización:
- Boya de rescate.
- Lata de rescate.
- Aro de rescate.
- Equipamiento básico primeros auxilios.
- Tabla espinal.
- Preservativo bucal, entre otros.
Todos tienen una función y deberás conocerlos en profundidad.
12. Descifra tu entorno
Debes saber cómo actuar en el ámbito en el que estás, para evitar sorpresas. El socorrista que opta por el mar tendrá que enfrentarse a situaciones con aguas revueltas, canal de retorno, fuertes corrientes, olas con rompiente en la orilla que son impredecibles, entre otros… Sin olvidar la fauna marina que llega a ponernos en situaciones complicadas.
SER SOCORRISTA es mucho más que colocarse una camiseta serigrafiada con las iniciales SOS.
Hay mucho trabajo y esfuerzo detrás del objetivo de salvar vidas, ponte manos a la obra sin perder ni un segundo.
Si estás pensando en ser profesional del socorrismo, o te interesa todo lo relacionado a ello. Te invitamos a conocer Auxdron LFG, el dron de rescate que General Drones tiene para ofrecerte. Te sorprenderá.